
Lilith es una figura mítica presente en diversas tradiciones, principalmente en la mitología mesopotámica, hebrea y medieval. Se la describe como la primera esposa de Adán, creada al mismo tiempo que él y de la misma tierra, a diferencia de Eva, que fue creada de una costilla de Adán. Lilith se negó a someterse a Adán y abandonó el Edén, convirtiéndose en un símbolo de independencia, rebeldía y poder femenino.
En la tradición hebrea, Lilith es vista como un ser demoníaco que ronda las noches, asociada con la muerte de los recién nacidos y la seducción de los hombres. Sin embargo, en la actualidad se ha reinterpretado como un arquetipo de libertad, instinto y feminidad salvaje. En la mitología la figura de Lilith aparece como espíritus de la noche. Su imagen ha sido reivindicada en el feminismo como un símbolo de autonomía y empoderamiento.
En astrología, Lilith no es un planeta o asteroide, sino un punto matemático en la órbita de la Luna, conocido como el “Punto de la Luna Negra”. Representa lo reprimido, lo tabú, la sexualidad no domesticada y las sombras del inconsciente. Lilith muestra áreas donde la persona experimenta una lucha interna con su lado instintivo y donde puede haber rechazo o represión. Esta muy relacionado con la energía de Plutón.
Lilith es el arquetipo de nuestro lado oscuro e irracional, que sale a la luz en diversos momentos de nuestro día a día.
El tránsito de Lilith por los signos y casas astrológicas revela momentos en los que se confrontan deseos ocultos, se desafían normas sociales y se activa una necesidad de autenticidad radical. Del 26 de marzo al 20 de diciembre de 2025, Lilith transitará por Escorpio, intensificando temas de transformación, poder, tabúes y sexualidad en el colectivo.
Este tránsito intensifica la personalidad, haciendo que la persona proyecte un aura de misterio, sensualidad y desafío. Es un período de autoexploración profunda, donde la autenticidad se vuelve primordial. Puede surgir un deseo de romper con roles impuestos y rechazar normas sociales. La imagen pública puede generar reacciones polarizadas: atracción o rechazo. Se despiertan impulsos viscerales y se vive con mayor intensidad, lo que puede llevar a confrontaciones con otros. También es un tiempo de descubrir el propio poder y aprender a manejarlo sin caer en autodestructividad.
Aquí, Lilith desafía la relación con los recursos, la autoestima y el deseo material. Puede haber fluctuaciones económicas o una atracción hacia formas de obtener dinero poco convencionales. También se manifiesta un conflicto entre el deseo de seguridad y la necesidad de experimentar sin restricciones. Este tránsito empuja a redefinir valores y comprender qué es realmente valioso. Puede haber tentaciones relacionadas con el dinero o los placeres sensuales, así como un rechazo hacia las estructuras económicas tradicionales.
La comunicación se vuelve más provocadora y directa. Se expresan pensamientos ocultos o reprimidos, lo que puede generar controversia. Es posible que surjan conflictos con hermanos, vecinos o compañeros de estudio. La mente se sumerge en lo oculto, despertando interés en temas esotéricos o tabú. También puede aparecer un rechazo hacia la educación tradicional o los discursos dominantes. Se busca la libertad intelectual y se experimenta con nuevas formas de pensamiento.
El hogar y la familia se convierten en el escenario de profundas revelaciones. Viejas heridas emocionales pueden resurgir, obligando a enfrentar la relación con la madre o las raíces. Se despierta una sensación de no pertenecer al entorno familiar o de querer romper con tradiciones impuestas. También puede haber cambios en la residencia o una búsqueda de independencia emocional. La sexualidad reprimida dentro del ámbito familiar puede salir a la luz, generando conflictos o transformaciones.
Este tránsito despierta la creatividad y el deseo de vivir experiencias intensas. Puede haber romances apasionados, pero también caóticos o clandestinos. Se rechazan las normas convencionales sobre el amor y la sexualidad. También se pueden cuestionar los roles tradicionales en la crianza de los hijos. Se busca expresar la individualidad sin restricciones, lo que puede atraer críticas o admiración. El arte y la expresión creativa se vuelven herramientas de liberación.
La rutina, el trabajo y la salud se ven afectados por este tránsito. Puede haber una rebelión contra estructuras laborales opresivas o una necesidad de mayor autonomía en el día a día. Se despierta una mayor conciencia sobre el cuerpo y su relación con el placer y la energía vital. También pueden surgir temas relacionados con enfermedades psicosomáticas o la necesidad de cambiar hábitos de salud.
Las relaciones se tornan intensas y desafiantes. Puede haber atracción hacia personas con una energía fuerte, magnética o transgresora. Se cuestionan las normas sobre el compromiso y la fidelidad. Es un período de confrontación con las sombras propias a través de la pareja. También pueden surgir vínculos obsesivos o relaciones de poder. Se aprende a equilibrar la independencia con la necesidad de conexión.
Este tránsito lleva a explorar los misterios de la muerte, la transformación y el poder. Se despierta un fuerte interés en la sexualidad, el ocultismo y la psicología profunda. También pueden surgir experiencias intensas relacionadas con la herencia, el dinero compartido o las crisis emocionales. Se enfrentan miedos profundos y se aprende a renacer desde las propias sombras. Puede haber un despertar espiritual o una revelación sobre el verdadero significado del control y la entrega.
Las creencias y la filosofía de vida son puestas a prueba. Se cuestionan dogmas religiosos, normas académicas y sistemas de pensamiento tradicionales. Puede haber una necesidad de viajar o explorar culturas y conocimientos alternativos. Es un período donde se busca la verdad sin restricciones. También pueden surgir conflictos con figuras de autoridad en el ámbito educativo o religioso.
La carrera y la imagen pública atraviesan un período de transformación. Se rechazan normas sociales impuestas sobre el éxito y la ambición. Puede haber un deseo de cambiar de profesión o de adoptar una postura más auténtica en el ámbito laboral. También es posible que surjan conflictos con figuras de poder o que se enfrenten escándalos públicos. Se aprende a redefinir la relación con la autoridad y el prestigio.
Las amistades y los proyectos colectivos toman un giro inusual. Se buscan grupos de personas con ideas radicales o fuera de lo convencional. Puede haber conflictos con amistades que no acepten la nueva actitud desafiante del individuo. También es un período de exploración en comunidades alternativas o de participación en movimientos contraculturales. Se aprende a equilibrar la independencia con la colaboración.
Este tránsito despierta los miedos más profundos y las sombras del inconsciente. Se enfrenta la sensación de aislamiento o el deseo de escapar de la realidad. También puede haber un interés por la espiritualidad, pero desde una perspectiva más transgresora. Es un período de sanación emocional, pero también de confrontación con patrones autodestructivos. Se aprende a aceptar la vulnerabilidad y a integrar lo reprimido.
El paso de Lilith en Escorpio traerá una energía intensa y transformadora para todos, obligándonos a enfrentar nuestras sombras y deseos más profundos.
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